Consumir frutas y verduras
libres de químicos es una tendencia a nivel mundial, y en La Serena, cada vez
son más los pequeños agricultores que producen de manera sustentable,
entregando productos de la más alta calidad gracias a la fertilización de
cultivos con abonos orgánicos.
Es en este contexto, que
profesionales de la oficina municipal Prodesal-Padis enseñan a través de
talleres teóricos y prácticos esta eficiente técnica.
“Trabajos con más de 300
usuarios, entre pequeños crianceros y agricultores. Nos enfocamos en el manejo
agroecológico, donde ellos empiezan a fertilizar sus cultivos, a protegerlos de
plagas utilizando los mismos elementos de su terreno, sacando productos
inocuos, sin químicos, lo que se traduces en no gastar dinero en pesticidas,
entregando finalmente productos de calidad y alimentos más sanos, lo cual
entrega un valor agregado”, señaló Óscar Campusano, profesional a cargo del
manejo agrícola del taller.
La actividad se realizó en
un huerto de frutillas del sector Ceres, productos que se caracterizan por la
baja y casi nula aplicación de productos químicos, cosechando frutas de buenas
características nutricionales e inocuas para el consumo humano.
“Llevo un año y medio con
este sistema y me ha servido mucho, uno aquí economiza de todo, abono o calidad
de trabajo. Estas capacitaciones son buenas porque ayudan a la gente con lo
teórico también, aprendemos de plagas, sobre las plantas y de esta manera
podremos entregar un producto de mejor calidad. Es un proceso lento pero se
notan los resultados, comentó Óscar Raúl, agricultor de frutillas.
“Todos los desechos que son
domésticos se utilizan para la elaboración de humus de lombriz y los desechos
de limpiezas, como hojas y malezas, se están ocupando para el compost. Acá no
se pierde material que va saliendo de la unidad productiva, se reutiliza y se
devuelven todos los nutrientes a través del compostaje”, indicó Luz Martínez,
Coordinadora programas Prodesal-Padis
Estas capacitaciones agroecológicas tienen también como
objetivo mantener sustentables los recursos naturales en los suelos, los que
cada vez se van deteriorando debido a la utilización excesiva de fertilizantes
químicos.
Con estos abonos
orgánicos, se permiten mejoras físicas, químicas y biológicas del suelo,
manteniendo una mayor retención de humedad, poniendo disponibles los nutrientes
para que las plantas puedan absorber más fácil y más rápido, lo que se traduce,
en frutas y vegetales de mejor calidad.