Esta mañana de miércoles una
turba de encapuchados ingresó violentamente a la Casa Central en el Campus
Andrés Bello de la Universidad de La Serena provocando daños en el mobiliario y
también agresiones a funcionarios, además de encender barricadas en la subida
de la colina El Pino, por lo que Fuerzas Especiales de Carabineros tuvo que
intervenir y llegar al lugar donde los involucrados se dieron a la fuga en
diversas direcciones.
La casa de estudios superiores
envió una declaración oficial sobre los hechos originados durante esta jornada:
- Hoy vivimos una situación de violencia
sin parangón en nuestra historia institucional. Unos 30 encapuchados ingresaron
a la Casa Central con evidentes intenciones de agredir a integrantes de nuestra
comunidad, amedrentándola con objetos contundentes y destruyendo todo lo que
encontraron a su paso.
- La situación vivida por los más de 60
funcionarias y funcionarios que cerca de las 13:00 horas trabajaban en las dependencias,
los expuso a una situación emocional y física de extrema violencia. Algunos de
ellos fueron golpeados; otros sufrieron el despojo de artículos personales o
fueron rociados con polvo de extintores; la mayoría, ante la agresividad y la
evidente amenaza a su integridad física y emocional, se cobijaron en sus
oficinas y aun así no estaban a salvo, porque los encapuchados patearon puertas
y portaban elementos para descerrajarlas.
- Nunca habíamos sentido tan de cerca la
violencia. Nos duele ser sujetos de una ira social descontrolada que representa
todo aquello que como universitarios repudiamos: la intolerancia, la violencia,
la imposición por la fuerza de visiones de mundo.
- Rechazamos enérgicamente lo acontecido.
No podemos sino disponer de todos los recursos que tenemos para apoyar el
restablecimiento de la salud emocional de nuestros funcionarios y funcionarias,
y sus entornos afectivos, trastocados por la irracionalidad de un grupo pequeño
en número, pero enorme en violencia.
- Hemos dispuesto que los funcionarios
golpeados sean atendidos en la Mutual de Seguridad para constatar lesiones y
recibir las atenciones médicas que correspondan. Para acompañar el estado
emocional de nuestras y nuestros funcionarios afectados, se dispuso de un lugar
común de contención, asistido por profesionales médicos y psicólogos(as) que
nos ayuden a canalizar lo vivido y recobrar la armonía laboral. Pese a esta
medida de contención, existen casos más severos de shock emocional. Para estas
situaciones se dispuso atención psicológica especial.
- Reiteramos nuestro más enérgico rechazo
a la violencia, tal como lo han manifestado de forma unánime y permanente la
Junta Directiva, el Consejo Académico y los distintos estamentos académicos y
funcionarios de la Universidad.
VIDEO DEL HECHO