Un total de 21
jóvenes y 4 profesores franceses viajaron desde el otro lado del mundo para
disfrutar del eclipse en la zona que concentrará el 70% de la observación
astronómica mundial de aquí al próximo año. Luego de vivir un emocionante
reencuentro con estudiantes chilenos que conocieron en su natal Nantes, los
europeos fueron testigos del gran fenómeno de la naturaleza. Todo en un inédito
campamento educativo instalado en medio de Punta Colorada, en el límite norte
de la Región de Coquimbo.
“Estoy muy
contenta de reencontrarme con todos los chilenos que habíamos visto hace tres
meses. Esta es una experiencia fenomenal que me ha gustado mucho”, expresó la
adolescente francesa de 14 años Elisa Choquet, quien cursa tercer grado en su
país. Por su parte, José Antonio Rojas,
estudiante de primero medio de The Internacional School La Serena, manifestó
que poder ver el eclipse con sus nuevos amigos europeos fue una vivencia única.
“Para mí ha sido una experiencia inolvidable, la pasé muy bien con ellos y con
mis amigos de acá. Verlos de nuevo me ha dado una felicidad en el corazón que
no se compara”, afirmó.
Los jóvenes
franceses del liceo Antoine de Saint-Exupéry llegaron al país luego de tres
años de haber aprendido y practicado español en su tierra. Según sostuvo su
profesora de castellano, Karine Butault, a ellos “les ha hecho mucha ilusión
estar aquí, es algo muy importante. Antes del proyecto no sabían bien qué era
un eclipse y trabajamos mucho en el tema en clases. Ahora nos encontrarnos de
nuevo con nuestros amigos chilenos y fue maravilloso, además en Francia un
viaje a América Latina es algo que no se suele hacer, allá toda la gente nos
decía ´Es muy difícil de creer´. Para los chicos ha sido una experiencia muy
diferente que nos ha abierto muchas puertas y que será para toda la vida”.
Gabriel Retuert,
Coordinador del proyecto “Sol y Sombra” y también del Área de Formación y
Desarrollo Personal de The International School La Serena, indicó que “el
objetivo ha sido crear una experiencia educativa de intercambio entre dos
mundos, el europeo y el latinoamericano, a propósito del eclipse total de sol.
Un intercambio que tiene un fin cultural, uno lingüístico – por el encuentro de
los idiomas español, inglés y francés – y también el científico, asociado a
este evento astronómico”.
La historia detrás del intercambio “Sol y Sombra”:
Pero este
apasionante proyecto no empezó este año, el camino para hacer realidad este
sueño comenzó en 2016, cuando la tecnología permitió a los profesores de The
International School de La Serena establecer los primeros contactos con los
docentes franceses, a través de video conferencia. Luego, vino un largo proceso
para recaudar fondos, mediante actividades relacionadas con el reciclaje, la
búsqueda de apoyo financiero en fundaciones y diversas iniciativas para generar
recursos en este lado del mundo y también en el país galo.
En abril de 2019
esta gran apuesta se concretó, con el viaje de un total de 23 jóvenes chilenos
y 3 profesores de la zona a Francia, país en que abrieron los fuegos para vivir
una experiencia educativa internacional inédita en la Región de Coquimbo, donde
el intercambio cultural, lingüístico y científico ha enriquecido la vida de los
jóvenes y también del cuerpo docente.
“De verdad hoy
no puedo creer que estoy aquí en Chile porque estamos preparando este viaje
hace mucho tiempo, son ya casi 4 años en total y es difícil de creer que
estamos acá, que conseguimos este proyecto que parecía un poco loco pero ya lo
estamos viviendo. Haber asistido al eclipse y habernos reencontrado con
nuestros amigos es algo tremendo para nosotros”, expresó la docente francesa
Karine Butault.
Por su parte,
Retuert agregó que “es un hecho único y extraordinario que ha marcado las vidas
de cada uno de los estudiantes que se ha comprometido con el proyecto. Será una
experiencia imborrable lo que ellos han vivido a su corta edad y un hecho muy significativo
en su formación humana”.
Cabe destacar
que hoy los adolescentes europeos se encuentran alojando en los hogares de las familias
del colegio serenense, bajo la modalidad de “corresponsalías”. Al respecto, la
apoderada y madre de la joven Catalina Caicedo, Esperanza Babativa, señaló encontrarse
“contentísima de recibir a la estudiante francesa que ya se ha hecho amiga de
mi hija. Ella dice que quiere volver después a Francia y cuando sea más grande,
vivir allá porque se trajo muchos aprendizajes de la vida, la cultura, el
reciclaje y la seguridad, es una experiencia muy bonita”.
Luego de
recorrer el territorio regional durante esta semana, los estudiantes franceses
seguirán su ruta dirigiéndose a la Región Metropolitana y Valparaíso para
continuar viviendo experiencias únicas en el último rincón del mundo. Momentos
de aprendizaje y fraternidad internacional que sin duda jamás olvidarán.